jueves, 8 de diciembre de 2016

DONDE DIJE DIGO...DIGO DIEGO


Hace más de diez años, con muy buen criterio y copiando de paises europeos, que ya entonces lo hacían, el gobierno municipal anuló el impuesto, sobre la base de que sin no hubiera coches aparcados en la calle, tendríamos muchas ventajas, menos suciedad, un mejor servicio de limpieza, mejor circulación, menos peligro de accidente al tener el viandante mejor visibilidad y mucho menos servicio de vigilancia nocturna, al estar todos los coches en la casa de su dueño. Todo ello conllevaría un ahorro, que compensa con creces un impuesto que por su cuantía tampoco resuelve gran cosa en el presupuesto de la casa.

Ahora a un premio nobel de economía se le ocurre recuperarlo, porque parece ser que ayudará a taponar despilfarros como el de enterrar contenedores y a los dos años volverlos arrancar y sustituirlos por otros hasta que cambie el gobierno y vuela otro iluminado, que crea que es más bueno volverlos a enterrar.

En resumen, si eres dueño de un coche y haces el esfuerzo de comprar una plaza de aparcamiento, a pesar de no manchar con grasa la vía pública y de pagar IBI , con hacer la calle más segura, con ahorra vigilancia nocturna y alguna otra ventaja, te verá obligado a partir de ahora a pagar porque haya tres metros delante de un bloque en el que no se pueda aparcar.

Si en cambio eres, de los que tiene en coche aparcado en el mismo lugar semanas enteras, a veces en lo alto de la acera, ya que hay que recordar que en Mataró hay zonas de algún barrio en las que está permitido hacerlo, si tu coche impide que el servicio de limpieza pueda efectuar su labor debidamente y haya que comprar y usar unos sopladores que nos envenenan a todos. Si tu coche pierde aceite, que cuando llueve hace que personas mayores puedan resbalar caer y hacerse daño, entonces tú tranquilo a tí te pagan la convidá.

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